La importancia de sentir la Navidad

Cuando llegan las fechas navideñas es muy común escuchar frases en sentidos opuestos con respecto a la celebración de dicha festividad.

Hay quien se siente feliz, jovial, deseoso de compartir dicha festividad con sus seres queridos. Otros, en cambio, desean que pasen pronto, que no les haga recordar navidades pasadas, en las que compartieron esos momentos con sus seres queridos, a los que han perdido y ya no volverán a recuperar. Incluso hay quien sólo ve en dichas fiestas navideñas, la vorágine consumista que afecta a casi todo el mundo, por no decir a todos.

Y es que la Navidad puede ser muchas cosas; motivo de alegría o de desdicha, de recogimiento o de consumo desenfrenado. Todo va a depender de la situación anímica de quien la quiera celebrar o por el contrario soportar.

Y al contrario de lo que la Navidad significaría en el aspecto religioso, pues no hay que olvidar que en dicha fecha (25 de diciembre) se celebra la conmemoración de la Natividad (nacimiento) de Jesucristo, impuesta por la Iglesia Católica,  sin entrar a debatir si es verdad o falso; lo cierto es que la Navidad, se ha convertido en una especie de "obra de teatro", donde todos tenemos que interpretar un papel que a veces no nos complace.

Pero dentro de todo lo molesto o negativo que tiene, también es una ocasión en la que nos ayuda a reflexionar y saber valorar las cosas.

Quizás en el presente no nos demos cuenta pero, después, cuando ya no podamos volver atrás, nos daremos cuenta de que sólo nos queda esos momentos de felicidad que supimos compartir con las personas amadas. Y aunque sólo sea por eso, vale la pena vivir la Navidad en paz, armonía y generosidad con los demás.

Posiblemente no te apetezca celebrar nada. Porque en verdad, y tal como va el mundo, hay muy poco que celebrar; pero aun así, permite que los demás puedan celebrarla como deseen, pues quizás sea su última Navidad o la tuya.

Regálales a los demás tu comprensión, tu tolerancia y tu respeto. Y si además puedes amar, mejor que mejor. Pero en todo caso, déjate querer siempre. Eso sólo depende de ti.

José Luis Giménez

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